Cómo proteger tu negocio de la inflación

La inflación está castigando a los consumidores. El último informe de la Oficina de Estadísticas Laborales (Bureau of Labor Statistics, BLS por sus siglas en inglés) muestra que los precios de bienes y servicios han subido un 8,6% en los últimos doce meses (de mayo 2021 a mayo 2022). Este es el mayor aumento de precios desde 1981.  

No debemos olvidar que la inflación también afecta a las pequeñas empresas. En una encuesta realizada por Ipsos recientemente, un 85% de los propietarios de pequeñas empresas expresó su preocupación por el impacto de la inflación en su negocio, y un 33% la calificó como su principal preocupación. En este artículo, analizaremos la inflación desde la perspectiva de un empresario. Nuestro objetivo es que aprendas cinco estrategias generales que ayuden a proteger tu negocio de la inflación actual.  

¿Qué es la inflación?

La inflación es un aumento sostenido en el precio de los bienes y servicios de una economía. Para calcular la inflación, los precios de los bienes y servicios del año actual se comparan con los precios de los mismos bienes y servicios del año anterior.  

Las medidas de inflación pueden ser amplias o estrechas. La prensa suele usar una medida general, como el Índice de Precios del Consumidor (Consumer Price Index, CPI por sus siglas en inglés), que incluye precios de diversos bienes y servicios. Sin embargo, como venimos diciendo, también existen índices de precios más específicos (para categorías determinadas) como el índice de materias primas. 

Cómo afecta la inflación a las pequeñas empresas

La inflación puede crear muchas dificultades a las empresas. He aquí algunas de ellas:

  • Aumento en el coste de los insumos: Los productos y servicios que necesitas para que tu negocio pueda funcionar son cada vez más caros. Según una encuesta de Business.org, desde el inicio de la pandemia, el 92% de los propietarios de pequeñas empresas se ha enfrentado a un aumento de costes generalizado
  • Aumento en el coste de endeudamiento: Cuanto más dure la inflación, más probable será que aumenten los costes de los préstamos. Los bancos y otras instituciones financieras empezarán a cobrar una prima de inflación más alta, subiendo los tipos de interés para mitigar el impacto que tienen los precios sobre la rentabilidad de sus préstamos 
  • Aumento en el coste del personal: Cuando los precios suben, muchas empresas aumentan su producción, contratando a más trabajadores para atender a la mayor demanda. Frecuentemente los trabajadores dejan su actual empresa por una empresa que ofrezca salarios más altos. Las empresas que quieran retener a sus empleados tendrán que aumentar sus salarios
  • Pérdida de clientes: Cuando los precios suben, los consumidores suelen recortar sus compras para no salirse del presupuesto. Es posible que pierdas clientes aunque no subas tus precios ya que otros bienes y servicios se estan comiendo una mayor parte del presupuesto de tus clientes. Es decir, tus clientes compraran menos simplemente porque gastan más de lo que solían gastarse en otros bienes y servicios 
  • Menores ganancias: En conjunto, todos los costes que acabamos de mencionar llevan a menos ganancias para tu empresa

Estrategias para combatir la inflación

  • Vigila tus gastos: Asegúrate de que gastas la mayor parte de tu dinero en lo esencial. Revisa de cerca tus costes de producción y recorta todo lo que no contribuya a tus resultados. En concreto, intenta eliminar costes indirectos o administrativos que no supongan una reducción del volumen de producción
  • Diversifica: Si subir precios te hace perder clientes y disminuye tus ganancias, busca formas de diversificar la gama de productos que ofreces al consumidor. Puedes hacerlo ofreciendo productos con mayores márgenes, o dirigiéndote a un segmento de clientes menos sensibles a las variaciones de precios
  • Vigila tus competidores: Esto puede ser una oportunidad para ganar nuevos clientes. Si mantienes los mismos precios y tus competidores suben los suyos, es más probable que los consumidores se queden contigo a largo plazo. Es posible que tus ganancias disminuyan durante algún tiempo, pero a medida que los costes de produccion se normalicen, el aumento de la demanda a través de nuevos clientes podría hacer que tus ganancias sean mayores de lo que eran antes
  • Habla con tus proveedores: Pregunta por qué están subiendo precios y si es un cambio permanente o temporal. Intenta ser consciente de su situación y muestra paciencia. Sin ser pesado, pregunta si hay algo que puedas hacer para conseguir precios más bajos o mejores condiciones de pago (nunca se sabe, puede que te hagan una oferta especial). Tus socios estarán más dispuestos a ayudarte en el futuro si te mantienes fiel a ellos   
  • Pide un préstamo: Para continuar con la expansion de tu negocio, puedes pedir un préstamo. Los tipos de interés siguen bajos en relación a la inflación, y por tanto es probable que acabes devolviendo el préstamo con dinero más barato del que pediste. Eso sí, asegúrate de tener un lugar donde invertir el dinero para sacarle rendimiento al préstamo 

Un último consejo

Si necesita ayuda para hacer frente a la inflación -o a cualquier otro problema que pueda tener-, póngase en contacto con info@withhansa.com y háblenos de su empresa. Puede concertar una llamada (gratuita) con un experto de Hansa lo antes posible.