Cómo preparar su pequeña empresa para una recesión

Los propietarios de pequeñas empresas están preocupados por la economía. En una encuesta reciente de Nationwide, el 70% de los propietarios de pequeñas empresas dicen que esperan una recesión en los próximos seis meses. Si no se siente preparado, sepa que no es el único: el 37% de los propietarios también dicen que sus empresas no están preparadas para una recesión. 

Nadie puede predecir los altibajos de la economía. Dicho esto, las recesiones son inevitables: todo empresario necesita una estrategia para afrontar una recesión. Este artículo cubre los elementos esenciales que necesita en su lista de comprobación: gestión de la tesorería, reducción de costes, estrategias con los clientes, opciones de financiación y mucho más...

¿Qué es una recesión? 

La Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER) define una recesión como un descenso significativo de la actividad económica en el conjunto de la economía que dura más de unos meses. Los economistas están mejorando en la predicción del momento de las recesiones, pero todavía tienen dificultades para predecir su gravedad o su duración. 

En pocas palabras, cuando las estadísticas agregadas como los ingresos personales y los gastos de consumo personal disminuyen durante varios meses, es probable que la economía entre en recesión, lo que significa que debe esperar menos clientes, menos gastos y menos ingresos para su negocio.   

El efectivo es el rey

Mantenga siempre efectivo a mano, especialmente durante una recesión. Es fácil caer en la autocomplacencia cuando el dinero entra a raudales, pero no dejes que eso te impida vigilar de cerca tus cuentas de efectivo.

La falta de atención al flujo de caja puede hacer que los tiempos difíciles sean aterradores. Según una encuesta de JP Morgan Chase, la pequeña empresa media tiene 27 días de reserva de efectivo. Eso significa que una empresa media puede seguir haciendo frente a todas sus salidas de efectivo (alquiler, mano de obra, servicios públicos, etc.) sin ganar dinero durante 27 días. 

Esto es lo que puedes hacer para acumular reservas de efectivo:

  • Controla las cuentas por cobrar: Minimiza el número de clientes que te deben dinero creando y haciendo un seguimiento de las facturas impagadas (un buen programa de contabilidad puede hacerlo automáticamente). Haz un seguimiento de los que se retrasan y cobra lo que se te debe ahora. Considera la posibilidad de añadir tasas por retraso en el pago para incentivar a los clientes a pagar a tiempo, e intenta establecer planes de pago recurrentes para que las entradas de dinero lleguen automáticamente.
  • Comprobar las cuentas por pagar: Revise todas las cuentas por pagar para confirmar los totales y las fechas de vencimiento de los pagos. Si es necesario, alargue los pagos hasta sus fechas de vencimiento. Si está pagando a sus proveedores en el momento de la recepción, pregunte si puede cambiar las condiciones de pago a 30 netos o incluso 60 netos para el próximo mes o dos. Puede que tus proveedores digan que no (ya que probablemente estén experimentando problemas similares), pero sólo hay una forma de averiguarlo. 
  • Revise sus gastos: Examina detenidamente los gastos de tu empresa y recorta todo lo que sea innecesario. Por ejemplo, las suscripciones a publicaciones comerciales o los servicios de biblioteca de fotos de archivo. Sea creativo y desafíese a reducir los costes sin que ello afecte negativamente a las operaciones de su empresa. No te pases de la raya, pero es hora de deshacerte del exceso de grasa en tu presupuesto.

Financiación del cliente

Usted no puede controlar la economía, pero puede facilitar a los clientes el gasto de su dinero. Considere la posibilidad de asociarse con un proveedor de " compre ahora y pague después " (BNPL) para ofrecer financiación a los clientes. Con el BNPL, el cliente pone un porcentaje del coste total de la compra (por ejemplo, el 25%) como pago inicial, y el proveedor de financiación cubre el resto, lo que le permite a usted cobrar por adelantado. 

Flexibilidad

Se trata de una oportunidad perfecta para ganar nuevos clientes, no sólo temporalmente. Dado que la economía sigue experimentando una importante inflación (los precios han subido un 7,7% en los últimos doce meses hasta octubre), bajar los precios podría atraer a más clientes a su negocio, sobre todo si sus competidores mantienen los mismos precios. Considere la posibilidad de ofrecer descuentos para los pedidos de prepago y las compras al por mayor. 

Además, no confíes en una o dos fuentes de ingresos: intenta diversificar tus fuentes de ingresos ofreciendo nuevos productos o servicios. Si un área de tu negocio se ralentiza, seguirás teniendo otras áreas a las que recurrir. 

Seguros

Si su empresa está asegurada, ahora es un buen momento para comprobar los detalles específicos de su póliza. Un elemento en el que querrá centrarse es la póliza de interrupción del negocio. El seguro de interrupción del negocio protege a las empresas de la pérdida de ingresos resultante de una catástrofe. Es posible que algunas pólizas no cubran las pérdidas económicas causadas por un virus o una recesión, por lo que conviene mirar la letra pequeña ahora y no después, cuando sea demasiado tarde.

Financiación de empresas

Incluso si está seguro de que puede superar esta recesión sin pedir préstamos, ahora es el momento de buscar proveedores de financiación e informarse sobre las líneas de crédito, los préstamos, el factoring de facturas y las tarjetas de crédito para empresas. Si ya tiene una línea de crédito, debería intentar renovarla pronto. No sólo porque los tipos de interés están subiendo, sino porque tiene más sentido obtener una ampliación ahora, cuando el crédito está ahí, que esperar a que su negocio esté en mala forma dentro de seis meses. 

Obtenga asesoramiento profesional 

Crear un plan para proteger su negocio puede ser difícil, especialmente si lo hace por su cuenta. La empresa de cada uno es diferente y puede necesitar asesoramiento personalizado. 

Hansa está aquí para ayudar. Póngase en contacto con info@withhansa.com para una consulta gratuita lo antes posible. Podemos analizar sus opciones en detalle y, si es necesario, ponerle en contacto con proveedores financieros para asegurarnos de que obtiene el mejor préstamo para su negocio. 

Prepárate y estarás listo para cualquier recesión que se te presente.